El elenco orquestal del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes reunió a más de 1500 personas en sus cuatro conciertos en la región de Los Lagos
Fue una semana de conciertos excepcionales lo que entregó la Orquesta de Cámara de Chile del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, con cuatro conciertos en las comunas de Fresia, Osorno, Puerto Montt y Calbuco, las que sumaron un público de más de 1500 personas que experimentaron la grandeza de la música docta, que en su momento fue popular y cercana a la gente, como lo fue en esta ocasión. Una gira que los 33 músicos con su director invitado, Pablo Carrasco, brindaron con talento, sencillez y mucha dedicación.
El Maestro se refirió al desempeño de la orquesta en esta gira, que lo dejó más que satisfecho, “fue una semana corta en cuanto a ensayos, con poco tiempo para preparar el repertorio, debido a los cortes de agua ocurridos en Santiago. Sin embargo, la Orquesta fue muy receptiva de mis indicaciones, lo que permitió conseguir un excelente desempeño durante los cuatro conciertos”. Lo que se notó en la conexión en el escenario entre los músicos y el director, y en el resultado final, el que provocó espontáneos aplausos del público que incluso, pedían otra interpretación de la orquesta para cerrar la noche.
En tanto que sobre dirigir la Orquesta, Carrasco aseguró que «ha sido un honor, un privilegio poder conducir a la OCCh. Son excelentes músicos a los que conozco en distintos escenarios y ámbitos. Con algunos he estado vinculado desde hace casi dos décadas, desde la época del Maestro Fernando Rozas, cuando participaba en las piezas corales como cantante; a otros, los más jóvenes, los pude dirigir en sus primeros pasos por las Orquestas Juveniles. En resumen me sentí muy cómodo».
Mientras que sobre la gira por la región, se destaca que la comuna de Fresia por primera vez recibió a la OCCH y un evento de esta índole, en el que el público respondió, lo mismo que en las demás comunas donde el frío y las constantes lluvias no amilanaron la convocatoria, «es siempre un desafío abordar circuitos que están más alejados, por la poca costumbre que tiene el público en esos lugares a espectáculos de este tipo, pese a eso, creo que siempre contamos con un buen número de asistentes y que las reacciones siempre fueron positivas. Creo que fue un excelente público».
Ya en la primera pieza, la intensidad musical caló hondo las emociones del público, no es para menos, se trató del viaje interno de Violeta Parra con su obra para ballet “El Gavilán”, donde según su propia autora “el tema de fondo es el amor. El amor que destruye”. Ésta es un arreglo del músico Sergio «Tilo» González, baterista del grupo Congreso, preparada especialmente para la Orquesta de Cámara de Chile. Pablo Carrasco, comentó antes de la interpretación, la existencia de una entrevista de 1960 a Violeta Parra, en radio Concepción en el que explica esta obra y la interpreta, considerada por muchos como su obra maestra. La que se puede encontrar en internet.
Mientras que los viajes con Vicente Bianchi y Félix Mendelssohn, fueron literalmente viajes, el primero por Perú con su obra “Momento Andino” escrita para cuerdas y flauta como recuerdo de su estancia en el país vecino, durante el primer lustro de la década del ’50. Mientras que “Sinfonía N° 4 en la Mayor”, es una de las composiciones más populares del músico alemán, quien comenzó a escribirla durante el otoño del 1830 durante su estadía en Italia. Mendelssohn intentó transmitir en la partitura sus impresiones personales sobre el arte, la naturaleza y el pueblo de la península, granjeándose así el apodo de «Italiana».