Se espera que una porción representativa del complejo de humedales de la cuenca del río Maullín, en la Región de Los Lagos se declaren Santuario de la Naturaleza.
Son aproximadamente 8.000 hectáreas de humedales formados por el río Maullín y sus tributarios en la Región de Los Lagos, las que distintas organizaciones científicas, ambientales y sociales esperan que sean declaradas Santuario de la Naturaleza, por la importancia ambiental, social y productiva para la región.
Desde el año 2005 la ONG Conservación Marina ha venido realizando estudios sobre las aves acuáticas y humedales de Maullín, con el fin de conocer la composición de la avifauna y el valor de conservación de estos ecosistemas.
La importante biodiversidad, en especial avifauna y mamíferos acuáticos en peligro de extinción, como la nutria de río o huillín, que habita en el sistema de humedales del río Maullín permitieron que el año 2002 el Ministerio del Medio Ambiente (en ese entonces Comisión Nacional del Medio Ambiente) incorporara a estos ecosistemas en el listado de Sitios Prioritarios para Conservación de Biodiversidad, mediante la Estrategia Regional de Conservación de Biodiversidad de la Región de Los Lagos (CONAMA 2002).
Los estudios realizados por la ONG Conservación Marina estiman que estos humedales son el hábitat de al menos 152 especies de aves silvestres, de las cuales 98 son aves acuáticas, de ellas 17 especies son migratorias, 6 migrantes australes y 11 boreales. Estos humedales albergan un 63% de las aves acuáticas que habitan en el país, siendo las más emblemáticas el flamenco chileno y el zarapito de pico recto, ave migratoria que cada año vuela más de 16.000 km desde sus zonas de reproducción en Alaska para llegar a los humedales costeros presentes en Maullín.
Los humedales de Maullín aún mantienen uno de los últimos remanentes de bosques inundados en buen estado de conservación, conocidos también como hualves. Estos son el hábitat de las nutrias de río, pero también de una riqueza florística de más de 250 especies, constituyendo también lugares sagrados para la cultura mapuche por ser zonas de plantas medicinales ancestrales.
Claudio Delgado, director de la ONG Conservación Marina dijo que es urgente brindar protección legal a este complejo de humedales único en Chile. “Este es un verdadero corredor biológico de humedales que va desde los Andes hasta el Océano Pacifico, aquí existe todo un gradiente de biodiversidad de alto valor para la conservación, pero también clave para sostener los medios de vida de muchas comunidades que se benefician de sus servicios ecosistémicos”, agregó Delgado.
Un primer logro y alianza clave
En el año 2016 gracias al trabajo colaborativo entre la ONG Conservación Marina y la municipalidad de Maullín, con el apoyo de múltiples organizaciones territoriales se logró el reconocimiento internacional para estos humedales, integrándose a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras, por albergar abundancias representativas de la población occidental de zarapitos de pico recto y una alta diversidad de especies de aves migratorias.
Una apuesta de protección a largo plazo
Los Santuarios de la Naturaleza (SN) son todos aquellos sitios terrestres o marinos que ofrezcan posibilidades especiales para estudios e investigaciones geológicas, paleontológicas, zoológicas, botánicas o de ecología, o que posean formaciones naturales, cuya conservación sea de interés para la ciencia o para el Estado. Justamente lo que los humedales del Maullín ofrecen.
Con la creación del Ministerio del Medio Ambiente en el 2010, se modificó el artículo 31 de la Ley de Monumentos Nacionales, creándose el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad. Al consejo se le facultó para proponer al Presidente de la República la creación de nuevas áreas protegidas en cualquiera de sus categorías, incluida SN, administrada por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN). De esta manera y a través de la comisión de patrimonio natural el CMN debe pronunciarse con informes técnicos sobre nuevas declaraciones.
En la actualidad el Municipio, la ONG Conservación Marina y la Mesa de Humedales de Llanquihue la cual reúne a organizaciones público y privadas, se encuentran en el proceso de elaboración de la propuesta técnica para la declaratoria del complejo de humedales de Maullín como Santuario de la Naturaleza y buscan sumar el apoyo ciudadano que permita proyectar los usos del territorio, la conservación de la naturaleza y la sustentabilidad de las actividades económicas que la comunidad local realiza. Pero también asegurar que los beneficios y servicios ecosistémicos de estos humedales se mantengan en el futuro, un futuro donde la convivencia con los humedales sea responsable y con el máximo respeto de las regulaciones ambientales, expresan sus representantes.
Los humedales fueron priorizados como espacios importantes de conservación desde el año 2002 recuerda el alcalde de Maullín Jorge Westermeier, por la gran cantidad de flora y fauna que existe en estos lugares. “Esta fue un priorización de hecho, sin ninguna norma en específico, ni un reglamento y ninguna restricción” comentó el edil. Posterior a eso, el municipio levantó estudios respecto a la situación medioambiental del río, para conocer lo que estaba ocurriendo. “Los impactos eran altos, de la pequeña agricultura, la ganadería, la sobreexplotación del bosque, también con algunas descargas de empresas privadas y sanitarias. Hechos que pusieron en alerta la condición del humedal”, recordó el Westermeier.
“El camino ha sido largo, pero esperamos que con la iniciativa que presentemos en el último trimestre del año se declaren estos humedales como Santuario de la Naturaleza. Si se logra el objetivo, vamos a establecer un comité de administración con las comunas cercanas a los humedales de Maullín para levantar iniciativas que apunten a la conservación” dijo Jorge Westermeier.
Comunidad de Carelmapu
Desde la comunidad indígena de Carelmapu, en palabras de su presidente, José Molina, dijo que la necesitad de declarar como Santuario de la Naturaleza a los humedales de Maullín radica en que aún se están viendo afectados por descargas, la eliminación de desechos que impactan los ecosistemas y el borde costero y además que existe la equivocada visión que separa a las personas de la naturaleza.
“Desde la mirada del mundo indígena es vital la protección de los bordes costeros y también de los humedales. Es importante que se comprenda que somos parte de la naturaleza y que no estamos afuera de ella y es una mirada que se ha ido perdiendo. Es necesario entender que todo lo que le afecte a ella, nos afectará igual”, explicó Molina.
Reconocimientos internacionales
La biodiversidad de aves ha llamado la atención en el extranjero. En 2009 estos ecosistemas se integraron a al listado de Áreas Importantes para Conservación de las Aves (IBAs, por sus siglas en inglés), reconocimiento internacional otorgado por la organización Birdlife Internacional.
En el año 2016, cinco humedales (ubicados en la zona baja del río y del tipo estuarino) del sistema de humedales del río Maullín fueron reconocidos por su especial importancia para las aves migratorias, e incorporados a la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP), como un Sitio de Importancia Regional, por mantener al menos el 1% de la población biogeográfica del Zarapito de pico recto (Limosa haemastica), los humedales de Maullín constituyen el quinto sitio en ingresar a la RHRAP en Chile.