- Las festividades de fin de año dejan como saldo toneladas de residuos producto del uso de cotillones que son rápidamente desechados en la vía pública, impactando en forma negativa al Medio Ambiente.
Considerando la enorme cantidad de residuos que se generan con el uso del tradicional cotillón durante la celebración de Año Nuevo -por lo general plásticos de un solo uso no reciclables y que generan gran impacto en el entorno-, el Seremi del Medio Ambiente de la Región de Los Lagos, Klaus Kosiel, extendió un llamado a la comunidad a prescindir el uso de este accesorio, sobre todo si no es reutilizable.
“Es un acto de conciencia medioambiental y compromiso con el cuidado de la naturaleza el reducir o erradicar el uso de plásticos de un solo uso en estas celebraciones. El llamado es a no utilizar cotillón, y en caso de hacerlo que lo recojan, reutilicen o reciclen”, explicó Kosiel.
Actualmente en redes sociales se difunde una campaña que pretende eliminar para siempre el cotillón, debido a la cantidad de residuos que genera en jornadas festivas. El mensaje de fondo de la campaña señala que por unos pocos minutos de diversión, el daño para el planeta es de miles de años afectando a la flora y fauna.
“La batalla contra los plásticos nos involucra a todos en distintos ámbitos de nuestras vidas. Así como la ley de prohibición de bolsas plásticas involucra al comercio y la campaña de bombillas principalmente a cafés y restaurantes, esta iniciativa llama a reducir o dejar de utilizar este tipo de plásticos en celebraciones, lo que como Ministerio valoramos positivamente”, agregó el seremi.
Según cifras que maneja la cartera -y que grafican la magnitud del problema- el 1 de enero de 2018, solamente en la Alameda de Santiago, se reportaron 35 toneladas de basura con motivos de la fiesta de Año Nuevo.