Universidad San Sebastián abrió las puertas de su Make It Lab, innovador espacio que permitirá el desarrollo de proyectos tecnológicos entre estudiantes, docentes y empresas en la región. Cuenta con impresoras 3D, dispositivos de realidad virtual, realidad aumentada y espacios co-work.
Bastó con ingresar a una aplicación móvil para que las luces del nuevo laboratorio de innovación y tecnología de la Universidad San Sebastián se iluminara, dando por inaugurado un espacio para el emprendimiento de proyectos universitarios, donde también pueden participar empresas y establecimientos educacionales de la región. Las modernas dependencias forman parte de un proyecto pensado en crear espacios más robustos para el desarrollo de la docencia y el fortalecimiento del proceso enseñanza-aprendizaje.
Carlos Escobar, director nacional de Innovación y Tecnología de la Casa de Estudios detalló que el salón “tiene muchos detalles: desde la técnica pedagógica, como la disposición de los elementos y cómo estos se pueden modificar, creando ambientes más prácticos y didácticos. También la iluminación, los recursos de realidad virtual, de realidad aumentada, modelado en 3D, entre otros, que fortalecen la búsqueda del conocimiento a través de la tecnología”, apuntó.
Espacio colaborativo
Durante la ceremonia que se desarrolló en la sede De la Patagonia de la institución universitaria el vicerrector, Sergio Hermosilla, destacó las oportunidades que ofrece este nuevo laboratorio. “Es un espacio multifacético, donde podremos trabajar con empresas, con estudiantes de colegios, con jóvenes de las carreras de ingeniería e integrando así a la comunidad del campus universitario”, puntualizó.
Hugo Cajas, gerente de Producción de Agua Dulce de Salmones Camanchaca, sostuvo que que durante la inauguración se pudo imaginar el desarrollo de muchas ideas y aplicaciones, pero reconoció que “lo fundamental es buscar el trabajo colaborativo entre la academia y la industria, porque hay muchas iniciativas que se pueden elaborar y aplicar en la industria. Creo que este trabajo, precisamente entre industria y academia es el foco perfecto para desarrollar e innovar en el país”.
En esta misma línea, Federico Casanello, decano de la Facultad de Ingeniería y Tecnología, explicó que gracias a este nuevo espacio “se genera un círculo virtuoso, sobretodo para los estudiantes, que son nativos digitales y se incentivan a desarrollar proyectos”.
Al respecto, Javiera Cárcamo, estudiante de la carrera de Ingeniería Civil Industrial manifestó que “además del uso de tecnologías, esto promoverá también la creatividad, la imaginación al poder trabajar en un espacio con múltiples características”, concluyó.