Experta de la UDLA explica que permitir que los niños pidan extensas listas de regalos genera en ellos una mayor exigencia y que cada vez deseen más, perdiendo el valor de las cosas.
A pocos días de que se celebre la Navidad, ya es posible observar un aumento en el flujo de personas que compran en los malls y tiendas a lo largo del país. Y es que la mayoría de las familias ya están adquiriendo los diversos regalos que año tras año los más pequeños de la casa le piden al viejito Pascuero.
El problema es que muchas veces las listas de regalo que elaboran los niños tienden a ser excesivas, lo que sin lugar a dudas afecta al bolsillo de los padres, sumado a la angustia que puede generarles el no poder costear la gran cantidad de obsequios solicitados.
Según Loreto Cantillana directora Escuela de Pedagogía en Educación Básica de Universidad de Las Américas hay formas más sencillas de explicarles a los niños que tengan conciencia que los regalos no son gratis y que tienen un costo en el presupuesto familiar. “En el caso de los niños que creen en el Viejo Pascuero, es importante indicarles que este debe entregar regalos a todas las niñas y niños del mundo y es por esta razón que no se le puede pedir un gran listado de juguetes porque su presupuesto tiene que alcanzar para todos.”
A lo anterior, se suma la importancia de reforzar en los más pequeños la idea que todos las niñas y niños son importantes y que en igual medida merecen un obsequio. “Además los adultos deben indicar que cada regalo tiene un costo económico y así como los padres invierten dinero cuando compran presentes para los cumpleaños, lo mismo le ocurre al Viejo Pascuero, quien le entrega regalos a todas las niñas y niños del mundo”, añade la profesional.
Tips para tomar en cuenta
Para hacer más sencilla la transmisión de los “mensajes de ahorro” en los regalones del hogar, la experta en educación de UDLA, entrega algunos prácticos consejos para guiar a los adultos en esta importante tarea:
- La primera medida que deben tomar, es dar ejemplo de que el dinero es la forma de financiar los gastos del diario vivir y no modelar prácticas de consumismo.
- Es relevante trabajar la educación financiera incorporando el concepto de ahorro como eje principal.
- Si enseñamos a los niños el valor de ahorrar, en el futuro serán adultos que organizan de forma correcta sus recursos y con estabilidad financiera.
- Finalmente, es fundamental realizar actividades en familia en donde el dinero no es protagonista.