Los “kine” – como se conocen- trabajan con turnos extensos y desarrollan una labor silenciosa, pero no menos importante a la hora de promover y educar a la comunidad en el cuidado de la salud y prevención del Covid-19. Profesionales de la ULagos asisten a familias de escasos recursos en municipios humildes, con visitas domiciliarias y atenciones personalizadas protegiendo a los más necesitados.
En la atención de urgencia, uno de los roles importantes lo tienen los/as kinesiólogos/as. Profesionales especializados en unidades de pacientes críticos y cuidados respiratorios que tienen como misión contribuir al restablecimiento de la función pulmonar. Asimismo, deben realizar técnicas kinésicas respiratorias que contribuyan a estimular la función respiratoria del paciente o efectuar visitas de largo aliento a personas mayores que viven en zonas extremas de la región de Los Lagos.
Karla Oyarzún, kinesióloga egresada el 2018, trabaja en el Programa Elige Vida Sana, pero debido a la contingencia cumple labores con visitas a hogares rurales. “En estos momentos estamos saliendo a ronda rural. Médico, enfermera kinesiólogo y tens. Hacemos principalmente controles respiratorios a pacientes crónicos, ya que tenemos muchos adultos mayores. Entonces atendemos primero a los crónicos, constatamos y realizamos un monitoreo de ellos, luego hacemos exámenes a toda la comunidad rural con promoción y educación del virus”, expresó la profesional.
Luis Bohle, profesional del departamento de Salud de Maullín, comentó los métodos de trabajo preventivos. “Para la prevención se han desplegado muchos canales informativos por medio del hospital, de redes sociales, la radio y el modo de atención del usuario con puntos de control en cada centro de salud, donde se diferencian los pacientes Covid 19 y se personaliza mucho más la atención, dependiendo de sus síntomas y exámenes respiratorios. Así, trabajamos de forma coordinada evitando el contagio y la propagación de la enfermedad”, señaló Bohle.
Javiera Martínez, jefa de carrera de Kinesiología del Campus Puerto Montt, señaló que el trabajo desarrollado por los kinesiólogos ULagos es más integrado en las zonas aisladas de la provincia. “Lo que se destaca de la labor en un lugar más aislado, es que la rehabilitación es más integral. No apunta sólo a mejorar la función corporal o estructural, sino abordar los factores de riesgo que pueda tener el o la paciente que puedan estimular el desarrollo de la enfermedad o empeorarla. Todo esto para mejorar su calidad de vida. Debemos evitar que el paciente enferme, porque muchos viven lejos de su centro de salud o por diferentes motivos les dificulta su acceso. Es importante educar al usuario/a en cuanto a su tratamiento, ya sea reforzando indicaciones de medicamentos, ayudas técnicas etc como ejercicios enseñados durante la terapia para continuar su tratamiento kinesiológico en casa, evitando de esta manera la policonsulta y así, no colapsamos los centros de salud local”, finalizó la jefa de carrera.
A pesar de la lejanía en que se encuentran los profesionales ULagos, en su labor de aportar al cuidado de la salud de los pacientes, se hace urgente un control más riguroso y efectivo del tránsito en esas localidades para evitar la proliferación del contagio. Una mayor inversión en la prevención y educación de la población, es parte de las respuestas que entregan los kinesiólogos de la ULagos, además de recomendar ejercer cuarentena total en la región.
Otro factor importante en la formación del estudiante de la Universidad de Los Lagos, es su sello profesional marcado por un enfoque integral hacia la medicina social, capaz de realizar procesos de promoción, prevención, diagnóstico y tratamiento kinesiológico a lo largo del ciclo vital de personas, familia y comunidad, con un fuerte compromiso ético y social. Por último, la temprana salida a terreno y prácticas con la población, van formando el perfil de un/una profesional dedicado/a su comunidad y dispuesto/a a colaborar en pandemias como las que vive hoy el país.