Cooperativa de trabajo busca expandirse para acortar la desigualdad salarial
Con un centenar de cooperados de diversas nacionalidades, Cooperativa Jatún Newén, apuesta por compartir el progreso económico, convirtiéndose en un verdadero motor de desarrollo social e inclusivo.
Hombres y mujeres de países como Perú, Haití, Ecuador, Colombia y Chile conforman la cooperativa de trabajo Jatún Newén, cuyo nombre nació de la combinación de las lenguas quechua y mapuche. Haciéndole honor a su denominación, que significa “el gran poder”, esta agrupación busca empoderar a quienes se desempeñan en aseo y ornato, mejorando sus condiciones laborales, salud y bienestar.
Tras más de una década trabajando en Chile, primero en una fábrica de bolsas y luego en la Vega Central, Freddy Flores, comenzó a trabajar a honorarios para la municipalidad de Recoleta. Luego, movido por una iniciativa del alcalde Daniel Jadue, surgió la idea de formar una cooperativa, con el apoyo jurídico y logístico de la municipalidad. Así nació Cooperativa Jatún Newén, que postuló a su primera licitación de limpieza de calles de Recoleta y se la adjudicó.
Hoy, los 85 cooperados buscan seguir creciendo, alcanzando tanto al sector público como a empresas privadas de otras comunas, para compartir los réditos como el gran equipo en el que se han transformado. “La idea de la cooperativa era frenar el lucro de las grandes empresas, para dar paso a un trabajo digno, rentable y seguro para todos nuestros compañeros”, explica el presidente de la Cooperativa Jatún Newén, Freddy Flores.
La historia no fue fácil, pues para poder participar de una licitación los socios debían reunir una millonaria garantía, la que lograron cubrir con recursos propios y un crédito otorgado por una cooperativa de ahorro y crédito. De eso han pasado cuatro años, en los que los socios de Jatún Newén han logrado adquirir varios activos, como por ejemplo, camiones, un compactador y una serie de máquinas de menor tamaño que les permiten prestar los mejores servicios de aseo y mantención de áreas verdes.
Ahora, Jatún Newén, que se emplaza en un terreno de 2.400 m2 de la calle Valdivieso, en Recoleta, está lista para competir con grandes empresas, gracias a su eficiente gestión y a un consejo de administración que genera estrategias competitivas. El siguiente paso, según el vicepresidente de la cooperativa, Floriano Limas, es ir incorporando tecnología, maximizar sus labores de reciclaje y continuar trabajando por un medio ambiente más limpio para todos.