Este pasado jueves 14 de julio no pasó desapercibida una repentina alza en el valor de los pasajes a Puerto Montt, desde Puerto Varas y Llanquihue. Según indican usuarios, el valor del trayecto Puerto Varas – Puerto Montt y Llanquihue – Puerto Montt aumentó $200, quedando en $1.400 y $1.200 respectivamente, lo que en ambos casos representa un alza del 20% aproximadamente.
Las reacciones negativas de los usuarios no se hicieron esperar en redes sociales: denuncian que durante la mañana se les cobró un valor y durante la tarde otro, boletos y carteles con precios desactualizados, alzas excesivas en tramos intermedios, y el no aviso de estos aumentos con la debida anticipación.
Estos son algunos de los comentarios en redes sociales:
«… Nadie avisa, simplemente suben (los pasajes), los empresarios no tienen ninguna consideración, esto es un horror para los que viajamos todos los días, se nos va a ir el sueldo en puros pasajes.»
«… Es una falta de respeto para los pasajeros, ya que no dieron ningún aviso y menos tienen boletos con los nuevos valores.»
Ante esta situación, el puertovarino Jordi Valenzuela Muñoz, ex-candidato a CORE de la Provincia de Llanquihue, quien ya ha denunciado sobre esta materia anteriormente, presentó una denuncia ante la SEREMI de Transportes y Telecomunicaciones de la Región de Los Lagos.
«Ante esta sorpresiva situación, he realizado todas las averiguaciones correspondientes en las oficinas de la SEREMI de Transportes y Telecomunicaciones de nuestra región, donde rápidamente me han indicado que estas empresas NO notificaron sobre esta alza al SEREMI, y que pese a ser catalogadas como «transporte rural» y no poseer obligación legal de avisar con 30 días de anticipación las alzas (como el transporte urbano), existía un compromiso por parte de las empresas con la SEREMI de realizar los avisos a ellos y a los usuarios igualmente. Desde la SEREMI me solicitaron realizar una denuncia formal para poder actuar y eso es lo que he hecho, adjuntando todas las respectivas pruebas».
«Más allá de lo legal, me preocupa la poca empatía por parte de las empresas y de las autoridades ante la situación actual del país y de los habitantes de nuestra región. Como indican en redes sociales, con estos valores se gastan aproximadamente $15.000 semanales en movilización, los que representan un gasto mensual altísimo en comparación a los sueldos que se están pagando hoy en día. Cabe además mencionar que algunas alzas superan ampliamente el aumento del combustibles y la inflación (algo ya denunciado por la Asociación de CIDER), por ejemplo, en diciembre del año 2021 el pasaje Puerto Varas – Llanquihue costaba $600 y hoy cuesta $900, es decir, ha subido un 50%, y en algunos casos es más absurdo, con alzas del 100% en comparación a diciembre 2021 (trayecto Puerto Varas – Pasarela Shell, $500 en diciembre 2021 y $1.000 hoy en día). Lamentablemente como estas alzas no son en Santiago, no son noticia nacional, así que dependemos mucho de la voluntad de las autoridades para llegar a soluciones, que parecen estar desentendidas ante las constantes alzas y reclamos por mal servicio de estos servicios en específico. Hago un llamado a nuestros parlamentarios, gobierno regional y delegación presidencial a que vayan buscando soluciones para nuestra región, la gente está aburrida de lo indigno y caro que es el transporte público en nuestra región».
Ante una situación similar hace unos días en la Provincia de Osorno, Pablo Joost Winkler (RD), SEREMI de Transportes y Telecomunicaciones de la región declaró: “el transporte público en general se mueve con lógicas de mercado, salvo para la locomoción urbano mayor en Osorno, Castro y Quellón donde tenemos control de las frecuencias, horarios y precios, y sin embargo, hemos solicitado a los operadores rurales (que no tienen la obligación de hacerlo) que nos informen cuáles son sus aumentos de tarifas para tener el registro, lo que sí tienen la obligación todos los prestadores de servicios es tener sus precios visibles a todos los usuarios… no tenemos mayores facultades para impedir aumentos de tarifas”.
Sin duda la molestia de la sociedad civil en general se ha ido acrecentando ante los constantes problemas con el transporte público regional, lo que representará un desafío para las nuevas autoridades.