Inédita iniciativa busca visibilizar y generar conciencia respecto de la importancia de la inclusión
Con música, bailes y actuaciones se desarrolló el I Encuentro Artístico de Hogares y Residencias Protegidas de Castro, que reunió a usuarios y usuarias de 3 dispositivos residenciales comunitarios de la capital provincial. La actividad realizada en el Centro Cultural tuvo como objetivo fortalecer la vida en comunidad de los residentes de los centros, la integración y la igualdad de oportunidades.
La jornada artística fue organizada de manera conjunta por la residencia protegida Millaray, dependiente de la fundación Coanil; la residencia protegida Alberto Hurtado, de la Fundación Hogar de Cristo, y el hogar protegido de Castro, que es parte del Hospital Dr. Augusto Riffart.
Katherine Cofré, psicóloga del área de salud mental de Atención Primaria del Servicio de Salud Chiloé, explicó que el programa de hogares y residencias protegidas “busca resolver la situación de personas con una discapacidad psiquiátrica severa, pero controlada, que tienen una dificultad socio-familiar dado que muchos han sido abandonados desde su infancia o en su vida adulta y tienen carencias habitacionales y de cuidado”.
Pensando en resolver este tipo de situaciones es que se habilitan cupos en centros habitacionales que son gestionados por un comité de hogares y residencias protegidas, que son coordinados por la unidad de salud mental del Servicio de Salud Chiloé, según aseveró la profesional.
El comité evalúa el ingreso de los usuarios y usuarias, además se encarga de “articular y supervisar a través de un modelo técnico, enfocado en los derechos y en la salud mental comunitaria, siempre cautelando y asegurando que se cumplan los lineamientos ministeriales en torno al funcionamiento interno y al trato con el usuario” manifestó Cofré.
La Directora de la residencia protegida Millaray, Norma Garrido, detalló que desarrollar la actividad significó una preparación de alrededor de dos meses: “Estamos muy contentos porque es la primera vez que se realiza esto, es algo inédito, juntamos a las tres residencias y quisimos mostrar a la comunidad el trabajo que realizamos día a día con nuestros usuarios. Es una ardua labor que llevamos a diario, pero con muchas ganas de que cada hogar sea una casa que los acoja y los desarrolle en sus distintas habilidades”.
Los usuarios y usuarias que son parte de los hogares y residencias protegidas reciben cobertura de sus necesidades básicas en cuanto a vivienda, alimentación y salud, por lo que se les brinda por ejemplo, acompañamiento terapéutico, donde son estimulados cognitivamente a través de actividades de rehabilitación y participación potenciando la estimulación espacio visual, la estimulación física, razonamiento, memoria, etc., según comentó Ilcia Nahuelquen, monitora cognitiva de la residencia Millaray.
La profesional expresó que fue todo un desafío la presentación artística pero que desde el primer ensayo hubo una buena recepción de quienes participaron. Respecto a la labor que realizan, destacó que “pocas personas saben que hay tres hogares aquí en Castro con personas en situación de discapacidad, son personas que tienen los mismos derechos que nosotros. El trabajo que hacemos es con amor, con mucho esfuerzo y siempre pensando en que ellos tengan la mejor calidad de vida posible”.