En esta cuarta versión participaron 20 dirigentes de Juntas de Vecinos, de comunidades de pueblos originarios, emprendedores del área del turismo y funcionarios municipales. La iniciativa es ejecutada por la Fundación Conservación Marina con el respaldo de la Facultad de Ciencias de la Universidad Santo Tomás.
Otra versión exitosa del curso «Gestión para la Conservación de Humedales» realizado por la Fundación Conservación Marina y la Facultad de Ciencias de la Universidad Santo Tomás, concluyó con 20 nuevos personeros acreditados en la conservación de las ciénagas que forman parte de la Red Humedales Marinos para la Conservación de Aves Playeras Migratorias.
Esta es la cuarta versión de este curso que, como explica Claudio Delgado, director de la Fundación Conservación Marina, busca ir capacitando a líderes locales, emprendedores, profesionales y estudiantes universitarios en torno a la importancia que reviste la conservación de los humedales. “Es un aporte significativo en cuando al entrenamiento y el aumento de las capacidades locales para conservar aves playeras y su hábitat en el Santuario de la Naturaleza del río Maullín, en el sitio de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras Migratorias en Coihuín, Chamiza y también en Curaco de Vélez y villa Quinchao en Chiloé”, planteó.
“Es un programa que se realiza bajo un convenio entre la Fundación y Santo Tomás que ha rendido frutos hasta ahora con alrededor de 80 personas que han sido certificados en sus competencias y aprendizajes sobre los distintos aspectos de la gestión necesaria para conservar humedales. Este es un aporte relevante para la comunidad y un buen ejemplo de cómo una organización no gubernamental como la nuestra junto a una institución educativa pueden ampliar las fronteras de la extensión académica y llegar directamente hacia las comunidades locales donde se realiza la conservación y en donde es necesario aumentar el nivel de conocimientos y la participación en este tipo de temas que son relevantes”, añadió.
Jaime Cursach, también de Fundación Conservación Marina y coordinador académico del curso dijo que en esta versión participaron dirigentes de Juntas de Vecinos, de comunidades de pueblos originarios, emprendedores del área del turismo e incluso algunos funcionarios municipales de las comunas de Maullín, Llanquihue, Los Muermos, Puerto Varas, Calbuco y Chiloé. “Esta es una iniciativa ciudadana donde en diez módulos aprenden con profesionales de las ciencias naturales y ciencias sociales, incluso de educación intercultural. Este año se inició en julio en modalidad virtual y en la ceremonia de cierre los estudiantes presentaron sus trabajos presencialmente en el auditorio de la UST. Nos sentimos muy felices que hayan podido contar con una beca que les permitió hacer el curso de manera gratuita en conjunto con Santo Tomás”.
Por su parte, el Dr. Luis Balboa, director del Departamento de Ciencias Básicas de Santo Tomás Puerto Montt recalcó la importancia de los vínculos de cooperación con la Fundación Conservación Marina y las necesidades de las comunidades. “Desde nuestra mirada, la alfabetización en ciencias, la ciencia ciudadana y la educación ambiental cumplen un rol fundamental en la transversalidad del desarrollo del conocimiento, el cuidado de la naturaleza y bienestar de las comunidades. Algo que consideramos fundamental desde la Facultad de Ciencias de nuestra casa de estudios”, sostuvo.
Defensa del territorio
Los participantes calificaron la experiencia como un constante aprendizaje. Yaquelin Cárcamo pertenece a una organización medioambiental llamada ‘Movimiento defendamos Carelmapu’. Dice que participar de él le hizo entender que era importante que se eduque sobre el tema. “Tengo amor por la naturaleza que me fue heredado porque vengo de una familia de pueblos originarios, pero nunca me había interesado científicamente el tema del cuidado de la naturaleza hasta que por un cultivo de eucaliptos en nuestra zona pudimos visualizar el daño que este hacía a la comunidad y ahí me di cuenta que debía educarme porque no puedo defender sólo desde el corazón, también lo tengo que hacer desde el aspecto científico con el conocimiento para poder transmitirlo a otras personas. Hoy tengo los argumentos y sé que se puede hacer al respecto hasta con bases legales de cómo defender el territorio y la naturaleza”, explicó.
Ivone Gallardo, también participó de esta cuarta versión. Ella es parte del trabajo en la Región de Planeta Vivo.org que tiene base en el norte de Chile. La activista dijo que “me parece súper importante que para la conservación de los humedales se tenga claro cuál son las producciones que existen en el área circundante a los humedales para poder hacer una medida de mitigación y cuantificar esa amenaza con números, con datos, para poder hacer un programa de conservación en base a estas amenazas existentes. Todos desarrollamos distintos ámbitos que finalmente confluyen en lo mismo porque hay una problemática grave y se necesita la colaboración de todos los que estén interesados a nivel regional y con el apoyo de las autoridades, para eso se necesita información y este curso nos ha dado esas herramientas”, finalizó.