Una veintena de artesanos se capacitaron en diversas técnicas para mejorar sus habilidades en el marco de la “Primera Residencia Insular de Luthería” en Curaco de Vélez. Este sábado se desarrollará una exposición para la comunidad y un taller para niños.
Luthieres de todo el país se reunieron en Chiloé con el objetivo de compartir experiencias y perfeccionar el delicado arte de la construcción artesanal de instrumentos musicales.
La “Primera Residencia Insular de Luthería” es desarrollada gracias al financiamiento del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes (Fondart) Regional. Son 21 artesanos que compartieron una serie de talleres durante cinco días en las dependencias de la Escuela Superior Campesina, en la comuna de Curaco de Vélez.
COMPARTIR SABERES
Según explica el lutier Felipe Ahumada, encargado del proyecto, en el país son escasas las instancias que tienen los artesanos para reflexionar sobre el proceso de elaboración de instrumentos que les permitan nutrir sus conocimientos y saberes.
Construir instrumentos es por esencia un oficio que los maestros ejecutan en completa soledad y cuyo desarrollo presenta dificultades. Estas se deben sortear sin la guía o consejo de otro artesano o muchas veces aventurarse en el trabajo bajo la lógica del ensayo y error, en detrimento de materiales, tiempo y calidad sonora.
“Cinco lutieres con vasta trayectoria en lutería, quienes guiaron distintos tipos de talleres. Es una residencia dirigida a artesanos, para que puedan afinar sus conocimientos en cuanto a la construcción de instrumentos. Hubo talleres de cocinado de barniz, creación de rosetas, de madera nativa, guitarrón chileno y una charla de instrucción a la musicalidad y sonoridad chilota tradicional”, expresó Ahumada.
La instancia formativa buscó convertirse en un espacio de intercambio de conocimientos y saberes en torno al diseño y construcción de instrumentos musicales de caja acústica y cuerda pulsada o frotada.
En este contexto el lutier Jorge Olate, uno de los participantes de la residencia, calificó la experiencia como un hito histórico para el oficio de la construcción de instrumentos a nivel nacional. Agregó que la instacia significó un crecimiento cultural y formativo de cada uno de los participantes.
“Residencias de este tipo no se veían desde hace décadas atrás, y me atrevería a decir que nunca hubieron, al menos en Chile. Es un hito, porque estamos pasando una generación de mucho secretismo, a una generaron de un absulto compartir altruistamente, sin ese sentido de competencia, sino que volviendo a lo que aún se vivie en Chiloé, esta manera de vivir a la minga, a que como comunidad nos sumemos a levantar juntos una cultura más poderosa, más propia”, dijo Olate.
ARTICULACIÓN
Al respecto, la seremi de las Culturas, Artes y Patrimonio de la región de Los Lagos, Cristina Añasco, valoró el espacio que entrega el proyecto para quienes desarrollan la actividad.
“Resaltamos la realización de este encuentro que busca ampliar conocimientos respecto al uso de maderas aplicada a la lutería, socializar problemáticas durante el proceso de construcción y evaluar posibles resoluciones en conjunto. Destacamos la articulación de redes de contacto entre lutieres, aprendices, artesanos y músicos, además de visibilizar, promover y revalorar la producción de instrumentos musicales en Chiloé, nuestra región y el país”, señaló.
En este marco, pasado sábado 12 de noviembre se programó una actividad de mediación con la comunidad, instancia en que las puertas de la residencia se abrieron para los vecinos y vecinas, con el objetivo que puedan participar de manera gratuita de una exposición en las dependencias de las Escuela Superior Campesina.
Paralelamente, se desarrolló un taller gratuito de creación de cordófonos y aerófonos a partir de materiales reciclados, dirigido a niños y niñas y jóvenes, a partir de los 8 años de edad.
