Recordada por participar en producciones nacionales como Pacto de Sangre -detective Isabel Bustos-, Javiera Hernández ha desarrollado su profesión como actriz desde hace ya varios años, sin embargo, este 2022 fue particularmente desafiante para su carrera al asumir como profesora a cargo del taller de actuación de Centro Barlovento, quienes están próximo a estrenar la presentación teatral Lo que nos hace Felices, cuyo texto es cien por ciento creado por jóvenes con discapacidad intelectual.
“Llegué al centro en agosto de este año, con hartas ganas de enseñar lo que sé hacer, pero también dispuesta a un aprendizaje mutuo. Fuera de todo prejuicio, a veces la gente piensa que trabajar con personas con discapacidad intelectual es difícil, pero para mí representó un desafío porque son personas igual que todos, lo único diferente es su condición y es por ello que, al abrirnos a escucharlos y conocerlos, todo fluye de mejor manera ya que vas entendiendo lo que quieren y necesitan”.
Centro Barlovento, es un espacio de encuentro, centrado en el desarrollo integral de jóvenes con discapacidad intelectual. Entre sus varias actividades está el taller de teatro, en donde bajo la dirección artística de Javiera Hernández y Javiera del campo, han podido crear una presentación de teatro totalmente desde cero. El guion está basado en sus propias experiencias, así como también incluye algunos de sus sueños y aquello que les gustaría hacer en la vida.
De los 8 jóvenes que integran el taller (4 mujeres y 4 hombres), 6 se presentarán como actores y actrices este próximo miércoles 21 en Vita Centro, ubicado en la comuna de Vitacura para exhibir por única vez la pieza dramática frente a sus familiares y amigos. “Si bien en esta oportunidad la presentación es para un público pequeño, a mí me gustaría que ojalá el próximo año pudiésemos hacer presentaciones para todo el público en donde además se puedan sumar otros colegas”, comenta Javiera.
En lo que respecta al trabajo de guion, Javiera indica que “cuando yo llegué al centro, ya había una buena parte del guion armado, gracias a Francisca Traslaviña, quién fue la profesora hasta antes de mi llegada, por lo que nosotros terminamos de armar este hermoso desafío”.
Es importante destacar que, si bien existe una condición distinta entre personas con y sin discapacidad, estas no deben considerarse una limitante, ya que, gracias a diversos programas y leyes de inclusión, la sociedad ha podido darse cuenta que todos podemos ser aptos para realizar una labor determinada en base a nuestros preferencias, gustos y aptitudes.
“Hay que darse el tiempo de conocer a la gente con discapacidad intelectual y gestionar espacios de trabajo y desarrollo desde sus propios recursos como cualquier persona. Particularmente he visto que los participantes del taller son tan capaces como cualquier colega actor, y para mí sería un sueño poder llevar esto a un siguiente paso, en donde mis alumnos de Centro Barlovento puedan llegar a actuar con otros actores tal y como vemos en algunas producciones de tv u otras entidades que han hecho obras de teatro inclusivo”, concluyó Javiera.