Sacarlos del lugar del siniestro, llevarlos a un nuevo hogar, curar sus heridas, darles cariño, tranquilizarlos, alimentarlos e hidratarlos, son algunos consejos para este tipo de situaciones.
191 incendios forestales se registraron en territorio chileno durante el pasado fin de semana, en su mayoría concentrados en la zona centro-sur del país. La ola de calor, con temperaturas que superaron los 40 grados, y el viento, propiciaron los incendios en las regiones de Ñuble, Biobío y también en la Araucanía.
En este escenario muchas familias se vieron en la obligación de evacuar de emergencia, escapando del fuego, incluso teniendo que dejar a sus mascotas. Hoy, algunos han tenido la fortuna de reencontrarse con sus animalitos, pero muchos de ellos con importantes consecuencias.
“Un animalito se comporta igual que un ser humano, es decir, también lo afecta el calor y el humo de un incendio, como lo que sufrieron muchas familias estos días en el sur de nuestro país. Por lo tanto, debemos estar muy atentos a las señales que alerten, aunque no sean evidentes. Por ejemplo, alertas son, en el caso de las vías respiratorias, que estén irritadas o que presente tos, que tengan náuseas, arcadas, ojos enrojecidos o llorosos, secreción nasal, inflamación de la garganta o la boca, o que dejen de comer. Con esos síntomas es recomendable llevarlo de inmediato de urgencia al veterinario”, afirma la experta y médico veterinaria de Gabrica (@somosgabricacl), Denisse Jorquera.
Otros síntomas para estar alertas son dificultad para respirar, (respirar con la boca abierta, si hacen más ruido o su respiración es rápida), si presentan fatiga (o debilidad, desorientación, marcha irregular o tropiezos).
“Ante las quemaduras evidentes, la recomendación es ir de urgencia al veterinario, ya que es vital conocer el grado, la profundidad de la quemadura y la extensión de la piel. Esto es fundamental para el pronóstico que va a tener nuestro animalito. Las curaciones deben ser inmediatas, si se va o no administrar suero, o suministrar antibióticos, porque la piel está muy expuesta a infecciones. El manejo en las primeras seis horas posteriores al incendio es vital”, agrega la veterinaria de Gabrica.
Durante un incendio, cabe destacar que los gatitos tienden a quedarse escondidos en sus hogares debido a que son mucho más territoriales que los perros, en cambio estos últimos tienden a arrancar buscando resguardo.
“Antes de realizar cualquier manejo, es muy importante que la evaluación de la gravedad de la quemadura la realice un médico veterinario. Las quemaduras leves pueden ser tratadas mediante una limpieza cuidadosa de la zona afectada con suero y aplicar alguna crema cicatrizante y regeneradora. En casos más graves el manejo puede incluir aplicar crema antibiótica para prevenir infecciones y analgésicos para aliviar el dolor. En quemaduras profundas, el manejo puede incluir la hospitalización del animal para someterlo a tratamiento intensivo”, enfatiza la veterinaria de Gabrica, Denisse Jorquera.
No obstante, y pese a todos los esfuerzos, cuando una quemadura supera el 50% de extensión en la piel, el animalito no va a tener un buen pronóstico de recuperación y de sobrevivencia.
En el caso de producirse quemaduras en las vías respiratorias, la experta de Gabrica señala que, “el animal pierde su capacidad normal de ventilar, pues sus vías respiratorias pierden funcionalidad. Siempre se debe evaluar el nivel de gravedad de la quemadura por parte de un médico veterinario. En casos leves, el tratamiento puede incluir una limpieza de la zona afectada y cremas antibióticas para tratar o prevenir una infección. Si es evidente que el animal está con dificultad para respirar normalmente (respira por la boca, tiene silbidos, respiración abdominal), es vital llevarlo de urgencia. En estos casos es necesario brindar un soporte de oxígeno, además de medicamentos para tratar el dolor y disminuir la inflamación. El manejo es integral, incluye hasta una dieta especial”.
Principales cuidados post incendio para nuestros animales:
- Lo primero es llevarlo con un veterinario para que los evalúe.
- Las mascotas sufren los efectos del humo, el calor y otras condiciones relacionadas a los incendios, por lo que hay que estar atentos a signos clínicos
- Disponer de agua fresca en todo momento para que puedan hidratarse cada vez que sea necesario.
- Entregarle mucho cariño, tranquilidad y protección. Así como la familia vivió el trauma del incendio, la mascota también lo experimentó. Los animales al igual que las personas sufren de estrés luego de situaciones traumáticas, ya que pueden recordar y vivenciar lo que pasaron.
- Reubicarlos en otro hogar momentáneamente, con otras personas, idealmente que conozca y sea un lugar tranquilo para que le puedan entregar lo necesario para su recuperación, ya que hay familias que perdieron sus casas y no pueden preocuparse adecuadamente de las mascotas, mientras se recupera el hogar.
- Se debe intentar, en la medida de lo posible, volver a establecer una rutina: alimentarlo a la misma hora, pasearlo a la misma hora, etc.
- Dedicar tiempo para jugar con la mascota y reducir su ansiedad.
“Al igual que los humanos, los animales se acostumbran a una rutina. Si viven una experiencia tan traumática como es un incendio, donde su hábitat regular cambia drásticamente, las mascotas pueden desarrollar estrés postraumático”, hace hincapié Denisse Jorquera. Como las mascotas son parte de nuestra familia, en lugares donde existe el riesgo latente de incendio u otra catástrofe natural, es fundamental contar con un plan de acción en caso de evacuación, que debe incluir el llevar con nosotros a nuestras mascotas u otro tipo de animales”, agrega la especialista de Gabrica.
Lo más importante es que todas las personas que tengan a su mascota con problemas después de este terrible incendio, acudan a un médico veterinario para recibir las indicaciones adecuadas para tratar a sus animalitos. Para más información visita www.gabrica.cl