- Ante las bajas temperaturas anunciadas para este fin de semana, en la empresa de agua y saneamiento, hicieron un llamado a la comunidad para proteger los medidores y así no provocar pérdidas de agua.
El plástico de polietileno, el cartón, la madera, e incluso el plumavit, sirven para proteger los medidores que registran el consumo de agua en las viviendas, ante la llegada de las heladas producto de las bajas temperaturas propias del periodo invernal.
“El congelamiento genera desperfectos en los medidores e incluso los rompen esto último implica que las viviendas se quedan sin la posibilidad de contar con este vital elemento mientras se lleva a cabo la reposición del medidor de agua. Es por ello que recomendamos a la comunidad que en forma proactiva protejan los medidores aislándolos de la intemperie cubriéndolos con cartón, plumavit, madera o plástico polietileno grueso”, expresó gerente de Clientes y Asuntos Externos de SURALIS, Pedro Barría.
El ejecutivo explicó que en caso de congelamiento del medidor y a objeto de descongelarlo se recomienda envolverlo con un paño húmedo en agua tibia y si se denota un mal funcionamiento del aparato, se debe llamar al 600 401 4000 para solicitar atención en el domicilio. En ningún caso se recomienda aplicarle agua caliente al medidor debido a que ello puede ocasionar que este se rompa.
Más allá de los problemas que generan las heladas, también se han detectado incidentes por manipulación indebida o mal uso. “Hay personas que los usan como asiento, afirman cosas en ellos o manipulan el sello de seguridad, lo que está sancionado según la normativa. El medidor es un aparato de precisión que siempre debe estar protegido, porque si resulta dañado, genera dificultades en la medición de consumo de agua potable”, precisó Barría.
La normativa vigente dice que “la empresa es responsable de la mantención y buen funcionamiento del medidor, debiendo cambiarlo en caso del término de la vida útil o si ha sufrido desperfectos no atribuibles a terceros”. En tanto, “el cliente es responsable de la custodia del medidor debiendo asumir el costo en caso de un robo, daño o mal funcionamiento por intervención de terceros”.