El pasado viernes, la autoridad sanitaria de la Región de Valparaíso informó de la existencia de un caso de tuberculosis pulmonar en un establecimiento educacional de Viña del Mar, hecho que ha causado inquietud en la comunidad sobre cómo se contagia esta enfermedad, sus síntomas y tratamiento.
Claudia Narváez, Directora de Carrera de Enfermería de UDLA Sede Viña del Mar, comenta que la Tuberculosis (TBC) es una enfermedad infectocontagiosa transmisible que tiene por agente causal el microorganismo Mycobacterium Tuberculosis. “Este microorganismo se transmite por vía aérea, es decir, cuando una persona enferma tose, estornuda, habla o canta, libera las bacterias hacia el aire, las que pueden ser inhaladas por personas que se encuentren cerca. La enfermedad puede afectar a varios órganos del cuerpo tales como riñones, hígado, cerebro, entre otros, sin embargo, la tuberculosis pulmonar es la más frecuente. Según el Ministerio de Salud (Minsal), en el 2019 diez millones de personas enfermaron de tuberculosis en el mundo y 1,4 millones de personas fallecieron por esta causa, constituyendo un problema de salud pública mundial”, explica.
La académica detalla que los síntomas que puede presentar una persona con tuberculosis pulmonar, como el caso confirmado en Viña del Mar, están directamente relacionados con la etapa de la infección, pues son diferentes en cada una de ellas. La primera etapa es la infección primaria por tuberculosis, en la que luego del contagio el sistema inmune captura y destruye casi la totalidad de las bacterias, pero algunas pueden sobrevivir y multiplicarse, produciendo síntomas leves que se confunden con resfrío: fiebre, cansancio, tos.
La segunda etapa es la infección latente por tuberculosis, donde la infección está controlada por el sistema inmune, pero las bacterias aún están vivas. Acá no existen síntomas y ni contagio hacia otras personas.
La tercera etapa es la tuberculosis activa. Aquí las bacterias no pueden ser controladas por el sistema inmune, por tanto, la sintomatología es mucho más aguda: tos seca, con sangre o mucosidad, dolor al respirar o toser, fiebre, escalofríos, sudoración por las noches, pérdida de peso, cansancio.
“En Chile existe el Programa de Control y Eliminación de la Tuberculosis, que es un plan constituido por normas técnicas que se cumplen a lo largo de todo el país con el objetivo de reducir el riesgo de infección, morbilidad y mortalidad por tuberculosis. Este programa tiene cuatro pilares: la vacunación preventiva contra la forma más grave de tuberculosis a todos los recién nacidos (vacuna BCG), el diagnóstico oportuno de las personas enfermas, el tratamiento de forma gratuita a todas las personas con TBC en los centros de salud familiar (Cesfam) y la búsqueda de contagios entre quienes están en contacto cotidiano con el usuario en tratamiento”, sostiene Claudia Narváez.
Por último. ¿Qué hacer si se ha estado cerca de una persona enferma de tuberculosis? La académica dice que el Minsal define como contacto a aquella persona que ha estado compartiendo por un tiempo determinado un espacio común con un enfermo, ya sea en el hogar o en otro entorno interior. Este contacto deberá ser diagnosticado a través de exámenes de secreciones respiratorias (baciloscopía y cultivo) los cuales se realizan de forma gratuita en los Cesfam para luego, en caso de resultar positivo, iniciar tratamiento, el que para tuberculosis pulmonar y extra pulmonar está determinado por la norma técnica para el control y eliminación de la enfermedad Minsal, cuyo esquema de medicamentos dependerá si es un caso nuevo de infección o una recurrencia, del peso del paciente, edad, así como también de enfermedades del sistema inmune que presente. La duración del tratamiento también es variable, pero no es menor a dos meses.