Histórico Yoco de Llicaldad cierra la temporada invernal con más de 1200 platillos vendidos
La actividad, que contó con la colaboración de Castro Municipio, fue ampliamente valorada por visitantes y los mismos organizadores.
Este sábado 28 y domingo 30 de julio, se desarrolló la vigesimoséptima versión del Yoco de Llicaldad, actividad organizada por la junta de vecinos y el Club Deportivo local, que busca coronar la temporada invernal con los mejores sabores del campo y el encanto de la música insular.
Aunque la estrella de este histórico evento es el tradicional yoco, platillo que incluye carne de cerdo ahumada, sopaipillas, roscas, chagua, prietas y milcaos, esta ocasión, los organizadores deleitaron también a los vecinos y visitantes con cazuela de ave y variados bebestibles. Todo esto fue amenizado el día sábado por la música de “Los Revoltosos de la Cueca”, el conjunto “Apoderados San Francisco” y el conjunto “Antukuyen”, mientras que el domingo, cerraron la jornada “Maruja Navarro”, el conjunto “El Trigal” y el conjunto “Arrayán”.
Cabe señalar que, en este evento Castro Municipio tiene un papel fundamental, ya que la Dirección de Cultura y Turismo coopera con la logística, el aparataje técnico y equipo humano, complementando así el gran trabajo de la comunidad del sector.
Respecto a estas dos exitosas jornadas, Enrique Luis de la Maza, secretario de la junta de vecinos de Llicaldad, resaltó la venta de más de 1.200 platos de yoco, además de recordar que este es uno de los festivales costumbristas más antiguos de Chiloé. “Preguntando y todo, somos una de las más antiguas a nivel de comunidad que existe dentro de la isla. Estamos orgullosos, este año hemos estado un poquito más ordenados, hemos tenido menos “atochamiento” de gente y esperamos seguir igual”, señaló.
Entre los puntos atractivos de esta 27 versión del Yoco de Llicaldad, estuvo la exhibición de artesanías por parte de los mismos vecinos, iniciativa ampliamente valorada por los asistentes, y por supuesto, el remate de las cabezas de chancho. Respecto a esto último, Rubén Llaimán Cárdenas, vecino de Ten Ten, agregó que “fue una muy buena la versión, y también el cariño de la gente de compartir este momento. Además, me rematé la cabeza de chancho, la última”, dijo jocosamente. En la misma línea, Ninfa Paillamán, señaló que “primera vez que vengo acá. Estuvo muy rico el yoco. Alcance a ver poquito pero súper lindo, todo muy lindo”.