A objeto de resaltar el valor del patrimonio natural existente en la Región de Los Lagos, particularmente sintetizado en las especies nativas que pueblan la Plaza Norte del Campus Puerto Montt, un equipo de profesionales integrado por la arquitecta y paisajista Nadia Nieto Gallardo, Álvaro Bascuñan y Daniel Monsalve adjudicaron un proyecto Fondart en la convocatoria 2023, para construir una escultura denominada Mirador Nativo, en pleno centro del espacio público universitario.
El proyecto Mirador Nativo une arte, arquitectura, academia y vida universitaria por medio de la construcción de un mirador ecosistémico en el “Jardín Nativo Plaza Norte”, existente en el Campus Puerto Montt de la Universidad de Los Lagos, ubicado en Chinquihue.
Su instalación busca dotar de un artefacto icónico, reconocible y habitable a esta plaza, que constituya la única área verde pública de la región, pensada desde las lógicas de la restauración ecológica del bosque Laurifolio de Los Lagos.
Para el equipo, la necesidad del proyecto nace con posterioridad a la ejecución del jardín nativo construido en el 2021, a objeto de constituirse en un soporte de las actividades de educación ambiental, la protección y conservación de las especies nativas y la valoración del patrimonio natural local. “En la problemática actual del calentamiento global y de la pérdida de biodiversidad, nuestra intención es volver a conectar a las personas con la naturaleza y reforzar la identidad con el territorio, relación perdida en la alienación de la sociedad. La diversidad ecológica es la base de ecosistemas sanos, su resiliencia y su capacidad de adaptación”, dice la arquitecta Nadia Nieto.
Mirador Nativo
La meta es diseñar y construir el Mirador Nativo en un plazo de 7 meses, con un financiamiento aproximado de 19 millones de pesos.
La pieza arquitectónica se organiza en torno al objetivo de dialogar con el paisaje costero, en un recorrido ascendente por sobre la pieza, que incluye infografías sobre el ecosistema. Se construirá este objeto escultórico, que propicie la discusión en torno a la importancia de la biodiversidad por sus servicios ecosistémicos y su belleza sublime.
Según el equipo de creadores, con la culminación de esta obra, se intenta que las personas tengan un instante de contemplación a través de una estructura gravitante en los jardines nativos de la universidad.
La obra se posiciona en el centro de la plaza y se recorre de manera circular, siguiendo una ruta escenográfica de reconocimiento de especies nativas y endémicas del sur de Chile.
La obra incorpora ilustraciones dispersas por los jardines, que expliquen de manera sencilla los hábitos de crecimientos, colorimetría, morfología y otras cualidades importantes de las especies presentes en la plaza, que sirva para la educación ambiental y el reconocimiento de estas especies del bosque siempre verde.