En la actualidad existen numerosos hábitos que inciden directamente en la aparición de enfermedades en la cavidad oral. Una mala dieta o el consumo de tabaco son los más conocidos, pero también tiene una relevancia importante el consumo en exceso de alcohol.
El alcohol, a nivel bucal, produce tinciones y erosiones en los dientes, halitosis o mal aliento y la aparición de diversas patologías como la enfermedad de caries producto de la disminución del flujo salival, enfermedades periodontales en las encías y hasta cáncer de boca, garganta y laringe, siendo la más preocupante, ya que la incidencia de casos en Chile ha ido aumentando y se trata, además, de una afección bastante agresiva.
Por otro lado, generalmente el alcohol es consumido con bebidas carbonatadas que contienen una alta concentración de azúcares y carbohidratos, que contribuyen a la aparición de la enfermedad de caries y, a largo plazo, a la pérdida de piezas dentales, afectando la capacidad de alimentación en forma correcta y consecuentemente la calidad de vida.
En este aspecto, el rol de las universidades y del Ministerio de Salud es relevante para generar acciones que permitan cambiar las estrategias de salud bucodental desde un enfoque curativo a un enfoque preventivo en los territorios, con foco en campañas educativas y diagnóstico precoz de estas patologías para evitar oportunamente la aparición de estas enfermedades en la población chilena.
Alexander Silva Faundez
Académico de Vinculación con el Medio
Escuela de Odontología
Universidad San Sebastián