Día Mundial de la Enfermedad de Parkinson
Diagnóstico precoz es clave para disminuir los índices de personas con este padecimiento
Cada 11 de abril se conmemora a nivel mundial para concientizar a la población sobre esta enfermedad que incluye entre sus síntomas rigidez muscular, movimientos lentos (bradicinesia) y la inestabilidad postural.
De acuerdo con datos de Parkinson´s Foundation, en el mundo hay aproximadamente 10 millones de personas que padecen la enfermedad de Parkinson, mientras que, en Chile, estudios recientes indican que existen alrededor de 40 mil pacientes diagnosticados con este padecimiento.
Ante estas cifras, es que, desde más de 20 años, cada 11 de abril se conmemora el Día Mundial de la Enfermedad de Parkinson, con el objetivo de concientizar a la población respecto a ella y hacer un llamado al diagnóstico precoz para contribuir a reducir las cifras de este trastorno neurodegenerativo que afecta al sistema nervioso central y se caracteriza por una disminución en la secreción de las neuronas dopaminérgicas (las que son responsables de los mecanismos de adaptación, respuesta y recompensa que provocan el comportamiento).
Según explica el terapeuta ocupacional y académico de la Facultad de Odontología y Ciencias de la Rehabilitación de la Universidad San Sebastián (USS), Alex Ríos, los principales síntomas incluyen “rigidez muscular, temblor de reposo, movimientos lentos (bradicinesia) e inestabilidad postural, esta última se observa a través de la pérdida del equilibrio y eventos de caídas. Estas manifestaciones clínicas repercuten sobre el desempeño de la persona, limitando su funcionalidad y como desencadenante una pérdida en su independencia en actividades de la vida diaria”.
El tratamiento para este padecimiento se centra en medicamentos y terapia de rehabilitación multidisciplinaria, los que en Chile se encuentran cubiertos por el sistema GES. Ante esto, el docente USS señala que “uno de los desafíos es transitar hacia el abordaje interdisciplinario de la intervención. Hoy existen buenas prácticas como la estimulación cerebral profunda, procedimiento que busca la recuperación de las funciones motoras afectadas disminuidas, pero es importante concientizar y educar a la población sobre la importancia de un diagnóstico precoz, poniendo atención en los síntomas, asesorándose y acudiendo a especialistas en caso de cualquier inquietud”.
En esa línea, resulta clave que el abordaje de la enfermedad se dé desde una mirada socio sanitaria y colectiva, donde el foco de intervención esté en la persona y su entorno para motivar al sujeto en su proceso de salud-enfermedad, y de esta forma velar por un tratamiento oportuno y acorde que entregue una mejor calidad de vida.