El Cesfam Quillahue celebró el wetripantu, que coincide con el solsticio de invierno y marca el inicio de renuevo para la cultura ancestral; el nuevo año de los pueblos originarios.
Durante esta significativa celebración, de gran importancia cultural y de reflexión para la comunidad williche, se plantaron dos árboles sagrados, canelo; además, los asistentes compartieron una bebida tradicional en base a hierbas medicinales.
A través de una rogativa que fue liderada por María Llancabure; dirigente social e integrante del invernadero “Manitos Verdes”, del Cesfam Quillahue, y en conjunto con los integrantes del Consejo de Desarrollo, funcionarios de salud y comunidad, dieron la bienvenida al nuevo ciclo de la naturaleza.
“Nos reunimos para el wetripantu, con los usuarios del invernadero “manitos verdes”, para celebrar un nuevo ciclo, y un nuevo año; esperando que esta celebración nos dé las bendiciones a todos los participantes”; expresó Paula Pelay, directora del Cesfam Quillahue.
“Esta es una ceremonia significativa”; agregó, “esperamos se mantenga en el tiempo, y que, con sus bendiciones, tengamos salud y podamos otorgar salud de calidad y con calidez a nuestra comunidad”. La directora; además, agradeció la voluntad de la comunidad, por trabajar con los equipos de salud del Cesfam. “La participación en diversas actividades contribuye a fortalecer los lazos entre todos, preservando y promoviendo la cultura y tradiciones ancestrales”.
José Vargas, dirigente social, hizo hincapié en la importancia de la participación en salud. Esta es una actividad importante para los pueblos originarios que hoy celebran esta fiesta, y ojalá las nuevas generaciones se convenzan que sin la paz y sin la amistad no hay nada en esta tierra; hay que defenderla, y participar en las acciones que hacen los pueblos originarios; es muy importante para los chilotes, williches. En su alocución; planteó, que «ojalá nuestros hijos sean capaces de continuar lo que hacemos nosotros y que esta celebración trascienda de generación en generación».
Este día es significativo; porque aparte de celebrar el nuevo año williche, se celebra la renovación de cada uno de nosotros; manifestó Gloria Unicahuin, presidenta del Consejo de Desarrollo de Cesfam Quillahue.
“Esperamos con estas acciones unir lazos en salud, en familia”; resaltó que espera con los nuevos augurios, que “este país y este pueblo siga prosperando y que cuide a nuestros funcionarios que trabajan día a día para la salud de nuestra población”. La dirigente social, desea unión y paz para cada uno de los que allí participaron.