Esta afección, que aqueja a más mujeres que hombres, tiene diversos tratamientos que están principalmente ligados al uso de medicamentos. Sin embargo, existen terapias y disciplinas que podrían ser fundamentales para aliviar y reducir los dolores, entre ellos, la kinesiología.

La fibromialgia es una enfermedad caracterizada por el dolor muscular generalizado en todo el cuerpo que es acompañado por síntomas, entre ellos, la fatiga, problemas del sueño y memoria, y también cambios en el estado del ánimo. Este padecimiento amplifica las sensaciones de dolor porque afecta el modo en que el cerebro y la médula espinal procesan las señales de dolor y de no dolor, según explica Mayo Clinic.

El jefe de carrera de Kinesiología UST Santiago, Sergio Acuña, añade que esta afección es «una enfermedad que aún mantiene líneas de investigación para determinar su causa debido a las dificultades en su comprensión fisiopatológica, donde además el acercamiento a entenderla radica en puntos claves en el cuerpo de las personas, precisamente estructuras musculares. Todo esto suma, debido a las investigaciones, que entender la fatiga, la irritabilidad, la casi nula presencia de marcadores biológicos de laboratorio de inflamación sea parte del diagnóstico que se debe considerar».

Acuña agrega que es necesario considerar el estado emocional de quien la padece “ya que se reportan situaciones de confusión y hasta olvido de pensamientos o recuerdos, y también confusión de palabras, que pueden estar marcados en el componente llamado ‘niebla mental'», asegurando que quienes sufren esta enfermedad son «pobremente comprendidas por lo que los aqueja, siendo inclusive subestimados sobre lo que tienen, generando angustias y desórdenes del estado anímico».

«Por lo anterior, es importante un acercamiento a su médico para dar la primera revisión y análisis sobre este malestar muscular que lleva a un estado de fatiga y dolor permanente difuso y poco entendible considerándolo crónico, y que además compromete el día a día. Su médico debería junto al tratamiento farmacológico, derivar a un equipo interdisciplinario de profesionales de la salud, que hoy es parte fundamental de las recomendaciones mundiales para su abordaje», recalcó.

El rol de los kinesiólogos

En esa línea, Acuña sostuvo que uno de los profesionales para asistir a quienes padecen de fibromialgia son los kinesiólogos, ya que ellos prescriben ejercicio terapéutico y clínico, «que constituye una actividad terapéutica de gran contribución junto a los trabajos de fuerza y aeróbicos, debido a sus aportes que van desde lo cardiovascular a lo neurológico, permitiendo la liberación de sustancias protectoras para su sistema nervioso central y endocrino».

«Las técnicas de elongación y masajes que proporcionan estos profesionales ayudan a aliviar las complicaciones de los tejidos de los músculos, tendones, piel y otros que se vean comprometidos. Así con ello, la terapia con electro analgesia, calor y frío son algunas de las alternativas que se pueden ofrecer, pero siempre de la mano del trabajo interdisciplinario y el acompañamiento con psicólogos y nutricionistas que permitirán un abordaje integral al paciente», cerró.