Este miércoles 9 de octubre, en el sector Piedra de Achao, se llevó a cabo un acto de desafectación del Espacio Costero Marino de Pueblos Originarios (ECMPO) en Isla Quinchao, un paso clave en las gestiones del Sindicato de Pescadores Bahía de Achao para tramitar su proyecto de Caleta de aproximadamente 65 hectáreas en la playa de Achao, de las cuales 15 se superponían con la solicitud de ECMPO y que las comunidades desafectaron a favor del sindicato.
La ceremonia, abierta a la comunidad, fue considerada un símbolo de confianza y buenas relaciones entre pescadores artesanales e indígenas, resaltando el valor del diálogo y los consensos en la administración compartida del borde costero.
Durante el evento, se destacó la importancia de buscar acuerdos en beneficio de todos los usuarios del mar, recordando que no pertenece a nadie en particular, sino que es un bien común que provee trabajo, cultura y beneficios a toda la comunidad. Las comunidades presentes recalcaron que, a pesar de las campañas negativas, la Ley que crea los ECMPO ha demostrado ser un instrumento clave para fomentar el respeto y la democratización de los espacios costeros.
Reacciones desde las comunidades
El presidente de la comunidad indígena Los Maitenes de Quinchao, José Calbucoy, fue enfático al señalar la importancia de este acuerdo y lo que representa para el futuro de las relaciones entre las comunidades y los sindicatos. “Hoy día tuvimos una ceremonia, le llamo yo, porque no deja de ser importante y relevante este acuerdo que se firmó con el sindicato Bahía de Achao y las comunidades solicitantes del ECMPO Quinchao. Participaron allí autoridades invitadas, representantes de todas las comunidades, sindicatos y vecinos que quisieron ser parte de esta ceremonia”, declaró Calbucoy, destacando el simbolismo de este encuentro y la unidad en torno al uso sostenible del mar.
Por su parte, Pamela Zúñiga Neún, coordinadora de la Mesa Territorial Wapintu Quinchao, ofreció una visión detallada sobre la desafectación y el impacto que este acuerdo tendrá en el proyecto de Caleta del Sindicato Bahía de Achao. “Le hemos denominado como acto de desafectación, y dentro del ECMPO de Quinchao y de los distintos usuarios del ECMPO de Achao está el sindicato Bahía del Pueblo de Achao. Este sindicato tiene un proyecto de caleta, el cual está detenido hace harto tiempo. Tuvimos la desagradable situación de que cuando vinieron las funcionarias de Sernapesca… nos contaron que tenían un proyecto Caleta que estaba suspendido y que la funcionaria de Sernapesca les había dicho que el ECMPO era él culpable, con estas palabras, de que su proyecto de ley Caleta no esté avanzando», explicó Zúñiga, subrayando el compromiso asumido para superar el impasse y avanzar de manera conjunta.
“Nosotros nos comprometimos con ellos a desafectar el área que nos solicitaban, el área que ellos van a ocupar, entonces se hace una desafectación que de cierta forma es como soltar un espacio del ECMPO para que la pesca artesanal de Achao pueda desarrollar su proyecto (de Caleta)”, afirmó Zuñiga Neún.
Se enfatizó durante el acto de desafectación, que la visión de las comunidades ha sido siempre clara respecto al objetivo de proteger y preservar el mar, pero también de colaborar con quienes dependen de él para su sustento. Calbucoy lo expresó con claridad: «Nosotros como comunidades originarias no nos oponemos al desarrollo, porque creemos que es justo y noble de parte nuestra también apoyar el desarrollo de los pescadores artesanales». Este punto de vista, que refleja un profundo respeto por el mar y sus recursos, destaca la importancia de la colaboración y el respeto mutuo para asegurar un futuro sostenible para las próximas generaciones”.
Ana Bontes Rain, presidenta de la comunidad Peumayén del sector Matao, compartió su satisfacción al ver que, tras meses de trabajo, se ha alcanzado este acuerdo. “Hoy logramos firmar un trabajo que llevamos de varios meses atrás, en donde dejamos en claro que nuestro propósito como comunidad es cuidar, proteger y resguardar el lafken y el mapu”.
Agregó Bontes Rain que “hoy no solo firmamos la desafectación, también se firmó un compromiso», enfatizando la importancia de este acuerdo no solo para las comunidades indígenas, sino también para los pescadores artesanales que podrán avanzar con su proyecto.
Pamela Zúñiga Neún también subrayó la relevancia de este acuerdo en medio de un contexto político industrial que buscaría generar un ambiente de conflicto y divisiones, señalando que “se crea una atmósfera, impulsada un poco por los industriales o un sector político, que quiere generar divisiones… Nosotros acá, los vecinos del sector Bahía del Sindicato, son algunos hasta familiares, entonces no podemos desconocer que ellos tienen un uso de ese espacio», resaltando cómo el diálogo puede superar las tensiones generadas por intereses externos y fortalecer los lazos entre quienes comparten el mismo territorio.
El compromiso adquirido no solo implica la desafectación del área necesaria para la caleta (que es un sector de 15 hectáreas) sino también un esfuerzo por garantizar que ambos actores, comunidades indígenas y sindicatos de pescadores, trabajen juntos en la administración del mar. Zúñiga enfatizó la importancia de este aspecto: «Lo que sí le pedimos es que… también pudiéramos firmar otro documento donde de buena fe nosotros los incluiríamos a ellos en el plan de administración del ECMPO y, a su vez, ellos nos puedan incluir a nosotros en el plan de administración de Ley Caleta. Porque eso es lo bueno de la Ley Caleta… que a diferencia también de quizás de las áreas de manejo, Ley Caleta permite que puedan existir otros usuarios».
En esa línea, también comparó la Ley Caleta con los ECMPO: “Es como parecido a la ECMPO, la ECMPO en ningún momento, en ningún caso se cierra solamente a las comunidades, la ECMPO es una oportunidad de administración conjunta, de ordenanza territorial que es abierta para el resto de la sociedad y es por esta razón que nosotros incluimos también al sindicato, así como en algún otro momento puede acercarse otra organización para que también pueda ser como usuaria y parte de la ECMPO. De hecho ya existen varias conjuntas de vecinos y las mismas escuelas que lo estamos invitando a las conversaciones”.
José Calbucoy también reiteró que el ECMPO no busca restringir el acceso al mar, sino garantizar su uso sostenible y preservarlo para las futuras generaciones. «Nosotros no estamos en contra del desarrollo, al contrario, pero estamos en contra, sí, y lo digo firmemente, en contra de la mentira, del mal uso de la información y de la mala interpretación que se le ha dado últimamente a la ley Lafkenche», declaró con firmeza, refiriéndose a las críticas infundadas que a veces rodean la implementación de la ley.
“Nosotros, con esta muestra de esta firma de desafectación, que son varias hectáreas, estamos diciendo que cuando hay voluntad, buena intención y concordancia, sí se pueden lograr las cosas. Y ojalá que sea como un ejemplo para los demás ECMPOS y para los demás pescadores, los demás sindicatos y para todo el ente usuario del mar, llamase industriales, no industriales, vecinos, bañistas, surfistas, que independientemente de que existan ECMPOs, pueden seguir haciendo uso como siempre se ha hecho del mar, pero sí, de una manera sostenible y sustentable en el tiempo, para el objetivo final que nosotros perseguimos, que es dejarle una buena herencia, como se dice, a las nuevas generaciones que nos siguen detrás, que vienen detrás nuestro, de tal manera que puedan tener un libre y soberano acceso a nuestro mar que nos baña a lo largo de todo Chile”.
Finalmente, Ana Bontes Rain resaltó la importancia de la Ley Lafkenche como una herramienta para garantizar que las próximas generaciones también puedan beneficiarse del mar. “La ley Lafkenche se generó para que algún día nuestras futuras generaciones puedan disfrutar de lo que hoy tenemos, y por ello estamos trabajando», concluyó, dejando en claro que este acuerdo es un paso importante en la dirección correcta para preservar el mar y fomentar el desarrollo sostenible.