Con asesoría, transparencia y una oferta que cumple con toda la normativa, el fundador de Grupo Parcelas reinventó su modelo de negocio ofreciendo una mejor alternativa frente a la saturación urbana.

Proyectos ubicados estratégicamente; crédito directo; asesoría especializada; y una división dedicada a la fabricación de casas modulares como opción para quienes buscan un terreno listo para llegar e instalarse, son los motores que movilizan a Grupo Parcelas , cuyo modelo de negocio responde a los ajustes que ha experimentado el mercado inmobiliario tradicional.

«La pandemia y la desaceleración económica han golpeado al sector, pero también a los bolsillos de los chilenos. Las restricciones de financiamiento y el aumento de precios de casas y departamentos llevaron a las personas a mirar otras alternativas, como terrenos y parcelaciones», explica Mauricio Lizana, fundador de Grupo Parcelas.

La empresa -que adquiere grandes terrenos para subdividirlos, cumpliendo con toda la normativa vigente- hace la diferencia al entregar una infraestructura de calidad a quienes buscan invertir en este tipo de activos. Por eso, cada parcela cuenta con caminos de acceso; conexiones disponibles para agua y luz; portón de acceso y otros atributos que sus clientes valoran.

De hecho, aunque no es una condición de compra, las personas pueden agregar una o más viviendas modulares a la compra de su terreno en Grupo Parcelas. Igualmente, quienes no cuentan con un crédito bancario aprobado tienen la opción de financiar su inversión con planes de pago flexibles y confiables, directamente con la propia inmobiliaria.

“La compra de un terreno no sólo puede ser la culminación del sueño de la casa propia, sino también una forma de mejorar la futura pensión o de lograr cierta independencia financiera”, comenta Mauricio Lizana, quien apuesta por zonas que proyectan una alta plusvalía.

Precisamente, debido a la connotación social que implica la compra de un activo inmobiliario, el equipo de Grupo Parcelas evalúa la capacidad de pago de cada comprador, mientras informa las condiciones del negocio con total transparencia.

“Nos ocupamos desde la verificación de títulos de propiedad hasta la inscripción de la escritura en el Conservador de Bienes Raíces, para responder con respaldo jurídico, ético y compromiso a las personas que eligen invertir lejos del abrumador ruido de las grandes urbes”, afirma el fundador de Grupo Parcelas.

Desarrollo local

En regiones como la de O’ Higgins, la llegada de Grupo Parcelas no ha pasado desapercibida. De hecho, las primeras parcelas puestas a la venta en la provincia de Colchagua cautivaron rápidamente a los compradores que, en pocas semanas del lanzamiento, adquirieron la totalidad de los terrenos. Una demanda similar se espera para los proyectos ubicados en San Fernando, Marchigüe y Rapel.

Con fuerte foco en la sostenibilidad, el grupo no sólo respeta el entorno natural donde se ubican las parcelas; Además, proporciona puntos de reciclaje e incentiva el desarrollo de la economía local, al generar nuevos empleos que -al mismo tiempo- refuerzan el sentido de comunidad. “Hacer negocios sostenibles y con propósito siempre es posible, aun cuando los tiempos parezcan desafiantes”, concluye Mauricio Lizana.

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